Función Metalingüística
La función metalingüística se refiere al uso del lenguaje para explicarse a sí mismo, es decir, para explicar el código de la lengua. En otras palabras, es el lenguaje que usamos para describir y reflexionar sobre la propia lengua.
Esta función del lenguaje se usa frecuentemente, tanto al nivel oral como escrito, cuando se pretende explicar el código de la lengua, su forma y su funcionamiento.
La función metalingüística emplea el lenguaje para describir, analizar o reflexionar sobre el propio código lingüístico. En esta función, el lenguaje deja de ser un medio para comunicar ideas externas y se convierte en el objeto de análisis.
Se utiliza para explicar aspectos como las normas gramaticales, el significado de palabras, las reglas ortográficas y los mecanismos que rigen la comunicación verbal. Por ejemplo:
«Los adjetivos calificativos sirven para señalar la cualidad del sujeto»;
«Antes de p y b siempre se escribe m».
Todos los discursos que explican las normas, reglas y condiciones para el uso correcto de la lengua hablada o escrita, son discursos con función metalingüística.
La función metalingüística expresa la preocupación y la reflexión sobre los elementos propios del lenguaje. Esto permite aclarar dudas en el uso de la lengua, comprender los significados de las palabras y funciones y encontrar formas para expresar correctamente los mensajes.
En la función metalingüística, se utiliza la cursiva para distinguir las palabras de las que se está hablando con respecto al enunciado. Por ejemplo:
«La palabra él solo lleva tilde cuando cumple la función de pronombre personal; de lo contrario, el funciona como artículo masculino»
«¿Qué significa otorrinolaringología?».
Cuando no exista la opción de emplear cursiva, como sucede con la escritura manual, dichas palabras deben ir entre comillas (“ ”).
La función metalingüística forma parte de una de las seis funciones del lenguaje identificadas por el lingüista Roman Jackobson. Completa el grupo junto a la función apelativa, la función referencial, la función fática, la función poética y la función expresiva o emotiva.
Vea también: Funciones del lenguaje.
Características de la función metalingüística
Enfoque en el lenguaje: el tema principal de esta función es el propio lenguaje, sus reglas y su estructura.
Uso frecuente en contextos educativos: se emplea para enseñar gramática, ortografía, semántica y otros aspectos de las lenguas.
Claridad y precisión: tiende a usar ejemplos concretos, explicaciones claras y un formato visual que destaque las palabras o reglas analizadas (cursivas, comillas, etc.).
Resolución de dudas lingüísticas: ayuda a aclarar dudas sobre el uso correcto de palabras o estructuras.
Meta-reflexión: es una herramienta para reflexionar sobre cómo usamos el lenguaje, lo que fomenta una comunicación más efectiva y consciente.
Ejemplos de función metalingüística
Explicación gramatical:
“Los verbos irregulares son aquellos que no siguen el patrón general de conjugación, como en el caso de 'ir', cuyo pasado es 'fui'”.
“En español, los sustantivos pueden clasificarse como masculinos o femeninos, como 'libro' (masculino) y 'mesa' (femenino)”.
Ortografía y acentuación:
“La palabra 'tú' lleva tilde cuando es pronombre personal, pero no cuando es un posesivo, como en ‘tu casa’”.
“La letra 'h' es muda, pero puede diferenciar palabras, como en ‘hola’ y ‘ola’”.
Semántica:
“La palabra ‘ambigüedad’ se refiere a una situación en la que algo tiene más de un significado posible”.
“‘Sinónimo’ significa que dos palabras tienen un significado similar, como 'feliz' y 'contento’”.
Diccionarios y manuales de estilo:
“La palabra ‘onomatopeya’ se utiliza para describir palabras que imitan sonidos, como ‘miau’ o ‘tic-tac’”.
“Según el diccionario, ‘ecléctico’ se refiere a alguien que combina ideas, estilos o conceptos de diversas fuentes”.
Metalingüística y otras funciones del lenguaje
Roman Jakobson identificó seis funciones principales del lenguaje, cada una enfocada en un aspecto específico de la comunicación. La función metalingüística es una de ellas y se distingue por su énfasis en el código del lenguaje. Aquí está el contexto general:
Función referencial: centrada en transmitir información objetiva. Ejemplo: “El agua hierve a 100 °C”.
Función expresiva o emotiva: refleja las emociones del hablante. Ejemplo: “¡Qué felicidad!”.
Función apelativa o conativa: busca influir en el receptor. Ejemplo: “Por favor, cierra la ventana”.
Función fática: asegura que el canal de comunicación esté abierto. Ejemplo: “¿Me escuchas?”.
Función poética: pone énfasis en la forma del mensaje. Ejemplo: “El mar susurra al amanecer”.
Cómo citar: Significados, Equipo (04/12/2024). "Función Metalingüística". En: Significados.com. Disponible en: https://www.significados.com/funcion-metalinguistica/ Consultado: