Las plantas

Stephen Rhoton

Graduado en Ingeniería de Sistemas Biológicos

Las plantas son seres vivos autótrofos, es decir, que producen su propio alimento. Son organismos pluricelulares y eucariontes, pues sus células contienen núcleo y pared celular de celulosa. Pertenecen al reino Plantae, así como al grupo de los productores, el primer eslabón de la cadena alimenticia.

Algunos ejemplos de plantas son árboles como los pinos y robles, flores como los girasoles, las rosas y los tulipanes, arbustos y hierbas. Todos estos surgieron a partir de la simbiosis de una cianobacteria y un protozoo eucariota, formándose así la primera alga. A lo largo de millones de años, las algas evolucionaron a las plantas que conocemos hoy en día.

Ejemplo de plantas que muestra un campo de flores, palmeras y musgo.

Hay una gran variedad de plantas, desde aquellas con flores a árboles grandes y plantas que no presentan tronco o tallo.

Una de las características comunes que tienen las plantas es que realizan la fotosíntesis a través de los cloroplastos. A partir de agua (H₂O), dióxido de carbono (CO₂) y la energía solar, obtienen glucosa como alimento (C₆H₁₂O₆) y emiten oxígeno (O₂) a la atmósfera. Por esta razón, las plantas son organismos claves en la oxigenación de la atmósfera y actúan como fijadores del carbono.

También efectúan la respiración celular, que es el proceso inverso de la fotosíntesis. Durante la noche, las plantas toman oxígeno y glucosa para obtener energía, liberando agua y dióxido de carbono. En paralelo a ambos procesos, las plantas también se sirven de sales minerales para el desarrollo y mantenimiento de todas las partes.

La mayoría de las plantas poseen un ciclo de vida haplodiplonte, con una fase haploide y otra diploide. En la fase haploide, también llamada gametofito, se forman células con un solo juego de cromosomas que luego se unen a otras mediante mitosis. En la diploide, también llamada esporofito, se forman esporas con todos los cromosomas, y que luego se dividen mediante meiosis.

Algunas plantas presentan reproducción asexual, con descendientes que comparten el mismo ADN. Algunos ejemplos son los tubérculos, las plantas que se reproducen por estolones, o plantas con reproducción mediante rizomas.

Por último, las plantas son sésiles, sin capacidad locomotora, o sea, no se pueden desplazar. No obstante, bastantes especies sí se pueden mover, inclinándose para captar mejor la luz solar o detectando superficies en las cuales apoyarse.

Tipos de plantas

Las plantas se dividen en distintas categorías según las características que las definan. A grandes rasgos, se pueden clasificar de la siguiente forma:

Briofitas
Traqueofitas
- Pteridofitas
- Espermafitas
  - Gimnospermas
  - Angiospermas
    - Monocotiledóneas
    - Dicotiledóneas

La primera clasificación envuelve dos tipos distintos, dependiendo de si presenta o no tejidos conductores, raíces, tallos y hojas:

Briofitas o plantas no vasculares: en este grupo entran todas las plantas que no contienen tejidos conductores, raíces, tallos, tronco u hojas. Un ejemplo son los musgos.
Traqueofitas, cormófitas o plantas vasculares: son aquellas que sí poseen tejidos conductores, y se caracterizan por la presencia de raíces, tallos o tronco, y hojas.

Dentro de las traqueofitas, existen dos clasificaciones distintas según si la planta produce semilla o no:

Pteridofitas o criptógamas: son el resto de plantas que no producen semillas, como los helechos y equisetos.
Espermafitas o fanerógamas: son las plantas que producen semilla.

Las espermafitas se dividen en dos grupos principales acordes a la presencia o no de frutos y óvulos que protejan las semillas y ovarios, así como flores:

Gimnospermas: son las plantas leñosas cuyas semillas están desprotegidas, pues no poseen frutos ni óvulos. El viento juega un papel clave en la reproducción de estos seres vivos. Las coníferas como los pinos, cipreses, cedros y secuoyas son algunos ejemplos principales.
Angiospermas: es el grupo de plantas que contienen frutos, óvulos y flores, de forma que las semillas y los ovarios están protegidos. El viento, los insectos, los pájaros y el consumo de sus frutos son una parte fundamental para la polinización y reproducción de estas plantas. Algunos ejemplos de angiospermas son el trigo, los manzanos, el trigo y los girasoles.

Para finalizar, en las angiospermas podemos encontrar dos tipos de plantas según el número de cotiledones u hojas primordiales:

Monocotiledóneas: son aquellas que, al germinar la semilla, crece un cotiledón, como los lirios, las orquídeas o las palmeras.
Dicotiledóneas: son aquellas que, al germinar la semilla, surgen dos cotiledones, como los tamarindos, la flor de cerezo, la flor de loto y las margaritas.

Otras clasificaciones

Las plantas también se pueden agrupar de otras formas. Por ejemplo, según su ciclo de vida:

Plantas anuales: completan su ciclo vital en menos de un año, como la albahaca o la soja.
Plantas bienales: su ciclo de vida abarca dos años, como el perejil y la cebolla.
Plantas perennes: son aquellas que viven varios años, como las petunias.

Dependiendo del tipo de ambiente extremo al que las plantas están adaptadas, también pueden ser:

Hidrófitas o plantas acuáticas: son plantas capaces de vivir en el agua o ambientes con un grado alto de humedad, como los nenúfares.
Xerófitas: son plantas que viven en condiciones desérticas y ambientes áridos, como los olivos y los cactus.
Halófilas: son plantas que se han adaptado a ambientes salinos.

Partes principales de una planta

Las partes de una planta pueden variar según el tipo y especie a la que pertenece. En general, podemos ver las siguientes partes:

Raíz: es el órgano subterráneo que sirve como fundamento de la planta, proporcionar agarre, y para absorber el agua y nutrientes presentes en la tierra. Con el tiempo, la raíz principal se divide en varias raíces secundarias-
Tallo o tronco: proporciona estructura y soporte para el resto de los órganos de las plantas vasculares. Es también el medio para el transporte del agua y nutrientes.
Nudo: es la parte de la planta de la cual se desarrolla al menos una rama o pecíolo, dando lugar a hojas.
Yema axilar: es un órgano de la planta situada entre el nudo y el pecíolo o rama. Ahí se forma el meristemo apical, que da lugar a la división y expansión celular, permitiendo la generación de pecíolos, ramas, hojas y flores.
Pecíolo o rama: es una ramificación del tallo o tronco que se extiende a los lados, dando lugar a las hojas y/o flores de la planta.
Hoja: órgano de la planta que recibe la luz solar y la convierten en energía mediante el proceso de la fotosíntesis.
Semilla o gameto: órgano portador de los genes de reproducción de la planta.
Fruto: órgano de la planta que protege las semillas.
Flor: órgano vital para la reproducción sexual, en donde se pueden producir semillas, polen y algunos frutos.